El
respeto es atender, prestar atención al otro, a su persona y a sus
asuntos; Consecuentemente, prestar atención, no solo a la persona, sino
también a sus asuntos, o a sus cosas, tanto materiales como relativas a
su personalidad o forma de ser.
lo
podemos lograr si prestamos atención y escuchamos, tener
consideración con nuestros compañeros y profesores, no hacer
intromisiones indebidas ni pretender moldearlos a la conveniencia
de uno.
El respeto es un sentimiento positivo que se refiere
a la acción de respetar; es equivalente a tener veneración, aprecio y
reconocimiento por una persona o cosa. Como tal, la palabra proviene del
latín respectus, que traduce ‘atención’, ‘consideración’, y
originalmente significaba ‘mirar de nuevo’, de allí que algo que merezca
una segunda mirada sea algo digno de respeto.
El respeto es uno de los valores morales
más importantes del ser humano, pues es fundamental para lograr una
armoniosa interacción social. Una de las premisas más importantes sobre
el respeto es que para ser respetado es necesario saber o aprender a
respetar, a comprender al otro, a valorar sus intereses y necesidades.
En este sentido, el respeto debe ser mutuo, y nacer de un sentimiento de reciprocidad.
Ahora
bien, el respeto también debe aprenderse. Respetar no significa estar
de acuerdo en todos los ámbitos con otra persona, sino que se trata de
no discriminar ni ofender a esa persona por su forma de vida y sus
decisiones, siempre y cuando dichas decisiones no causen ningún daño, ni
afecten o irrespeten a los demás.